Como no queremos que tú tampoco te pierdas experiencias como éstas, os dejamos algunos extractos de las sensaciones vividas por los participantes de uno de los intercambios juveniles en el que Ticket2Europe ha participado.

Este artículo está basado en experiencias personales y puntos de vista de los participantes españoles que han participado en este proyecto subvencionado por el programa Erasmus+ de la Comisión Europea.

 

«El intercambio juvenil Healthy and Optimistic me aportó un mayor conocimiento de mí mismo, gracias a las actividades que hicimos durante el proyecto mejoré mi conexión intrapersonal con la naturaleza, descubrí cómo controlar mis impulsos nerviosos y cognitivos gracias a técnicas de respiración y relajación. Puede parecer obvio, pero a veces nos olvidamos de que respirar es algo muy físico (aunque se relacione estrechamente con el mundo emocional), y gracias a esos ejercicios aprendimos a hacerlo de manera adecuada. Fue una experiencia muy grata conocer a personas con unos valores culturales y una trayectoria personal diferente.

Desarrollé habilidades que me han sido útiles en el día a día, y esas conductas no podrían haber sido enseñadas, allí las aprendimos de forma natural, al trasladarnos a un contexto­ socio-cultural diferente.«

José Joaquín García

«Este proyecto me sirvió para ver las cosas desde otro punto de vista, conocer gente nueva sin prejuzgar y otras culturas. Comprender que cosas que en nuestro país son normales en otros no los son y viceversa.

 Me ha gustado mucho la experiencia del viaje y del Youth Exchange, disfrutar de los grandes paisajes de Lituania, las tardes de risas junto al lago, las técnicas de relajación y consejos sobre la alimentación.

Sin duda una experiencia que recomiendo a cualquiera, aunque la organización por parte de la entidad de acogida fue bastante mejorable.»

César González

 

«Durante mi estancia en Daugirdiskes con el youth exchange «healthy and optimistic», he aprendido otros hábitos de vida diferentes a los que suelo tener siendo una bonita experiencia. Además, pudimos disfrutar del ejercicio al aire libre, en unas muy buenas instalaciones y en plena naturaleza.

En definitiva, para mí este proyecto ha sido muy bueno y una experiencia inigualable.»

Agustín Fernández

«Healthy and Optimistic taught me how to overcome stress and anxiety thanks to the outstanding landscape in Daugirdiskes, beautiful and friendly people i met and most of that, the high state of mindfulness i could achieve in the starry nights. Thanks to the European Commission and partners this experience can be possible for supporting and go ahead with towering ideas. However, pointing out that the hosting organization must learn how to handle with organization and coordination of groups because it was awful.»

Cynthia Cabestany (group leader)

«En el mes más caluroso del año se nos brindó la oportunidad a un grupo de jóvenes españoles de poder visitar otro país y de relacionar con jóvenes de otras culturas. En este país báltico pudimos desarrollar nuestras habilidades lingüísticas, pero sobre todo humanas.

El objetivo de este intercambio fue darnos una nueva perspectiva acerca de cómo tener una vida saludable. No estaba de acuerdo con algunas de susnormas,  en un principio, pero es de sabios conocer las diferentes opciones para poder hablar de ellas con conocimiento.

Tras terminar esta experiencia vi como mis habilidades sociales mejoraron, además de conocer nuevos métodos para afrontar mi vida siendo más saludable.»

Jesús Martínez

«My experience in Lithuania was different in comparison with similar project that I have done.

It was a challenge at first to get used to the lifestyle, the vegan food , yoga and other activities. I am not used to. I enjoyed meeting new people with very different views and opinions.

Over all, this was a good experience and it has motivated me to eat healthier and live a healthier lifestyle. Without a doubt this was an experience that I would love to do again.»

Laura Crespo

«Desde mi punto de vista, tengo que decir que fue un proyecto espectacular. Quizás en el momento uno piensa que hay muchas cosas que mejorar, pero cuando todo pasa, cuando los meses quedan atrás lo único que recuerdas son las bonitas experiencias.

Cierto es que fue difícil adaptarse a la comida vegetariana, pero es algo que no cambiaría, aprendí que se puede vivir sin carne y que no es tan complicado como parece.
Respecto a la gente, he de decir que inmejorable, en todos los sentidos. Echamos en falta a un grupo reducido de belgas pero el resto de participantes de ese país nos dieron muchas alegrías y animación.

 Además de ser un proyecto de yoga, relajación, deporte y comida vegetariana, también lo era de No-Alcohol, algo que no nos sentó a ninguno de los participantes del todo bien, pero las reglas son las reglas y al final todo salió a pedir de boca.

De las actividades creo que fuimos de menos a más, aunque el segundo día fue genial con una gincana por los alrededores (en la cual acabamos llenos de barro), tuvimos una profesora muy repelente un par de días, pero por suerte para nosotros no duró mucho. El resto del proyecto lo notó, con actividades realizadas por los group leaders, energizers de los propios participantes, el buen rollo se hizo notar.

Sería realmente complicado poder decir mi mejor momento, podría decir que fue el momento de la sauna cuando salimos corriendo y saltábamos al lago, o quizás nuestro baile en el concurso de Eurovisión que tuvimos en la Healthy Rave. No lo sé, de verdad hubo grandes momentos y pequeños, como cuando nos fuimos cuatro personas por la noche y nos perdimos para jugar en la madrugada a algunos energizers, o momentos en la noche junto al fuego, o tal vez los momentos con mis compañeros de habitación (un estonio y un turco).

Y qué decir de aquel sitio, lugar era idílico, una cabaña con un pequeño lago a unos metros, una sauna apostada a las lindes del mismo, un pequeño valle para jugar al fútbol, una mesita de ping-pong. Creo que todo el entorno era perfecto e inmejorable.

Podría hacer un libro sobre como fue todo, desde mis propias experiencias, pasando por las actividades y terminando en mi amarga marcha de aquel lugar que recordaré el resto de mi vida.

Sin duda repetiré, doy mil gracias a la Comisión Europea por fomentar esta clase de programas y que realza la unión de distintos países dentro de la Unión Europea y aliados.»

Juan Angel Cirera